martes

Villa


Primero el sol la derrite
la vacía y la funda
más luego
después de la fascinación
así misma naciéndose
desflorándose.

lunes

Corporal


me siento en esta puesta
que en declive
me descifra en la noche
la tarde queda a espaldas
en su inanimada talla
los fragores fomentados
del quehacer mortal
el aullar de insistentes canes
y el retrasado pájaro
que va tiñendo tu sigilo

sábado

Corporal

La sobriedad del viento 
ornamenta la viña pobre,
como una exhalación en el tamo, ahora 
la claridad es desabrida, pátina de la greda.

martes

Enjaezado


Perpetuar no me es difícil, sin embargo reconozco que nada hay tan complejo
como el suspender el aliento.


No pruebes debilitarte

en medio de los charcos
ni cerca de las hojas partidas del nogal



como eruditos hombres

y sensorias mujeres
reclínate al borde del preciso horizonte y ansía



sujetar el presente, es quizá

una idea privada de albores
es quizá, el último de los dones.

sábado

.16.


Y allí tu piel, gastada por cenizas en la sombra
y allí me pregunté
si había acariciado todo fundamento
o si lo haría cuando la lengua
experimentara la falla de cuadrillas.

Y allí tu piel, sin redundar relámpagos
soñando
sin temer la despedida.

viernes

Corporal




la ronca voz
penetra con acentuación
de minúsculo doblez
este cielo pausado

es esta anchura
que varía en nívea roca
traveseando
quien inscribe en el asombro
la señal voceada

sábado

Días




En los días del abismo,
quien relegaba tenía los párpados inundados de acequias.
Nacían del silencio de lenguas incineradas
con pintura en la condena
y de las caricias insociables
que era todo lo que no lograba explicar,
todo lo que no lograba suspirar.
En los días del paraíso,
quien relegaba asumía párpados inundados de tristeza,
como si un baile de sombras en nevado oscurecido
renunciara a su paso la gama de la memoria.

Nada obstruía esa fila de dicciones adormecidas
en medio de la tempestad,
salvo la copla del torpe más abatido de la tierra
y la luz de la hembra en el recuerdo arrinconada.
La más apetecida, la que no.

Corporal


y al cavilar 
en que nada se contiene
desde el fin 
de la existencia oscura
pregunta el corazón ¿y ahora?

jueves

Razones

Me dije:
es necesario sitiar la sombra de los pinos
plegar su forma en donde la memoria encalla
hilvanar las voces de los pájaros
multiplicando geografías

guardar en el bolsillo algún ocaso
un poco de sol desvanecido
celebrar la lluvia del último verano
rescatar los fracasos y el invierno

la huella invisible de quien fuera
atrapar el silencio hasta su borde
vestir el espesor de un argumento
la voz y la plegaria del álamo pasando.

Os dije:
es preciso cosechar estas razones
que mis días han fundado
trazando como un conjuro al ave
y una noción de mar desde esta orilla
evitando así las despedidas
desplegando las alas del poema.

sábado

Inevitables



Perpetuar no me es difícil, sin embargo reconozco que nada hay tan complejo
como el aturdimiento del calzado en la pobreza,
el descubierto deseo obstinado en los comienzos, la ronda festiva
y el fingido cortejo de la oscuridad.

-rosa mutable deshojada
milagro velando diligente y sin guaridas
mudanza festejando lluvias reservadas
venidero desorden del teatro-

viernes

Corporal


Apasionado arresto
en percudida hartura
desde aquí
me adjudicaba la confianza

lo cumpliste
en esferas intachables
enalteciéndote más allá
de toda vista

nuevamente el mar
abandonó el borgoña por tu claro
y tu furiosa pluma
nuevamente establecida.

martes

Espira imaginaria


Al oculto y más allá
esbozo de amplitud septentrional
cubierto al infinito.

Taurus
morada zodiacal despierta en polvo
nuevo suceso
estoica germinal, mujer de río
su eternidad, sin duda.

lunes

El sentido


Transformado se alberga en lo difícil,
cautivo en la forma imperceptible o cruel
irrumpe y brilla
sólo un segundo para ser mirado o apresado.

Ya el abismo fue lacrado,
al no estar, deberemos explicar
que el agua era la oda.

viernes

Transparencias

I
se han desplazado del frío las durezas
en la paz
del hogar ambicionado

II
hoy se acuerda de los años
que han pasado
mientras cuenta una a una sus lesiones

III
la ingenuidad que había en sus principios
de la edad más henchida
de lo dado

miércoles

Enfoques


suspiran las bocas
rescatando el sonido
que asiste entre líneas

-une tiempos-

vierte lunas de desvelo
remueve en la fonética
la sofocada voz

el escrito del cuerpo
sacudiendo reparos
desde prieta grafía

viernes

Imperio




Le hallaron cerca de las costas
las pestañas
diminutos pedazos de reflejo
en donde constaba una luciérnaga

candela de noche que optó morir
en haz de brillo
antes que circular
perpetuamente a tientas oprimida.

jueves

Del duplicado espejo

brilla en la garganta hambrienta
del agujero cavado por las noches
el animal estremecido
subiendo
concibe un camino
como la hiedra
¿qué casta eyaculas
al romperse la flor de una herida?
clausura
el arca saciada de funestas perlas
de recuerdos que pasaron



sábado

Tu habilidad de arenas

La costa aguarda
tu órbita efectuada

del ocre
la primera luz entona
variando su tendencia

entre matiz henchido y nieblas
que disipan la tristeza
meces un quebrado contrabajo

preludio
claror excluido
transitando entre las olas el temprano.

jueves

.15.


Apenas atendida, oscilando
entre la expectativa y el acaecimiento

como si el soplo con que muere fuera

la misma infiltración por la que nace

así despeña el agua

de aquel cántaro.


La palabra infinita, esencial

exigencia ilimitada de lo ínfimo

en total trayecto despegada

como la otorga o solicita a la memoria

el momento evasivo

tiempo a tiempo.

domingo

Ella

Hay un ángel bullicioso con ella a toda hora
ni fanales, ni gusanos de luz
tiemblan cuando el éxtasis la resguarda


las celosías húmedas se empecinan
tornándola inmensa
tarda en sus pensamientos
y serena en la compresión de los soles


indiscreta como las cabras nuevas abre canales y salidas
maravillándose en las frases
en los troncos pintados
y lo escribe en su rostro


ella ama las desobediencias
cuando el aire altera los artificios
cede su hogar
y la palabra es área.

jueves

Corporal

en los años sucedidos
he recorrido con continuidad
el sendero que lleva al agua

no se me ocurre ningún lugar superior
en donde pasar los días

el agua se eterniza ondeando dulce
y los peces
no han cesado de nadar

lunes

Agua de abril



Son estos vocablos embriagados
minúsculas simientes
del festejo que traslada todo nominativo de lo que vivimos
para unir en un momento de hidalguía
tu agua y tu cielo con mi tierra.

domingo

Corporal


observándote
descubro tus latidos
notable gracia y permiso
del destacado retraimiento
en que te expresas

sábado

Sin pausa

Murmuran en el contorno de un fuego
que no incendia sus almas.
Sus idiomas descubiertos
delinean el cuerpo de quien ríe
y ya no pertenece al espesor de la tierra.


Su arresto
intransigencia y filosofía.
Su audacia
el peligro latiendo en el silencio.


martes

El interior sin fin

Se reveló la almeja
fué inevitable la ceguera

los apasionados peces de tu vientre
te fueron develados

corrió el secreto amor
de caderas en la arena

desbandando en la brisa
el ruido de tu llanto enamorado.

miércoles

.14.



Cayendo van
una a una las fallebas
punto de tregua conservado inalterable

a su centro de engranajes
sobre la biela rotacional del globo

aún no se ha dejado ver
el mejor de los secretos

ése que muchos quieren archivar
y así seguir rodando.

domingo

.13.





la falta me escolta
con los techos destruidos
las puertas de madera henchidas
las lumbreras sin vidrios

por lo demás
la fibra, que combate desdichas
los manuales actuales
la apetencia de a ratos

y el soplo para la gente que querella
y estrofas en sus sueños
como pequeños fusiles de pasión
junto a los indigentes
sin delirio ni fetiches
junto a los que resisten
el yermo sin atenuante

y en cada trozo de pan
o en las comidas tiernas con luz grácil
después de la borrasca, frente al mar
algún poema caminará el cielo violeta


martes

.12.





¿en dónde muere el mar,
en dónde nace?
¿por qué dura mocedad
viajó toda esta agua?

con el naufragio llegó la tempestad
peligroso extremo de caída

¿será tan hondo el mundo?

misterioso es su azul,
tan permitido


viernes

.11.







Blancura impúdica
y pausado mirar de ojos entreabiertos,
un cigarro prende en el extremo de su boca de aquelarre,
dice cosas intrépidas con voz adormecida de contracción extensa
que mitiga la cruda liberación de la sentencia.

Melancólica luz
le incendia en las pupilas libre tiempo insolente
y el aroma que destina
le resume tanto como sus labios.

domingo

.10.


Perpetuar no me es difícil, sin embargo reconozco
que nada hay más inquebrantable que la mesura de los lugares magníficos.

De nosotros, nuestras fantasías de exégesis
dejan indemnes los textos mismos, que aún así
perduran a nuestras notas.
Más la pequeña reconstrucción imprudente
ocasionada a las rocas,
la menor vía irrumpiendo la campiña
en donde prosperó el heno durante siglos,
establece infaliblemente lo infranqueable.
Es entonces que la belleza de los días pocas veces se equivoca
y deja paso al apareo de lo auténtico.

jueves

.9.





Perpetuar no me es difícil, sin embargo reconozco que nada hay tan complejo
como el compromiso.

Ciertas historias cuentan ya indiscutibles años.
Sin embargo, comprender el progresar de sus semillas vibratorias,
observarlas brotar hasta abrigar la tierra huraña
con un lienzo ocre, prontamente desplegarse inquiriendo monte,
y así acabarse en espigas,
dar flor y cederse dúctilmente a la oblación
que llega en el tajo del hocino
continúa pareciéndome un milagro.

martes

.8.

lo esencial
podría detonarse
en incandescencia nivelada
un leve movimiento en el barranco
un enlace de azules aceitados

miércoles

.7.

La voz de vuestro mensaje
me ha devuelto el corrido resabio de la tierra
con que sustentar la curva del cielo

incienso ardiente
agraz, porfiado
neta fuerza que concentra

y colonizas
y hay tanta irradiación
que el fuego no se ve.

jueves

.6.




frente al cristal añejo salpicado de silencio
frente a la negra noche desvestida
cabalga
sangre cabalga
en ríos arteriales
y en corazón sangrando se desangra

intranquilo el apetito se desboca
como río torrentoso
en el amor que saborea
exceso de palabras

martes

.5.


En la concupiscencia del supuesto hechizo,
musgo

diáfana membrana de versátil jaez en flor directa
concedida en promesa
al porvenir renovado del diluvio.

sábado

.4.

Ya estás sobre este bastimento, ya estás por tierra y lluvia, tus filos, tus prodigios,
tus verdes, tus timones, bajo un halo abundante de figura y trayecto.
Y si tu aspecto resultó perdido, entre mis manos ya está reconstruido.
Eres aquí, con lo que alcanza, siempre.

domingo

.3.

El impulso de su seguridad, la vigencia de su furia
o, manifiestamente, la dicha de mi tiempo.

martes

.2.

Transfiero este poema
y abandono todos sus colores dispersos
por cada uno de los estribores de tu confidencia.

Excluirse a tiempo es iniciar nuevamente.


.1.

Perpetuar no me es difícil, sin embargo reconozco que nada hay tan complejo
como el ser neutral con el desaparecido pasado.